El color violeta significa transformación ya que nace de la unión de dos personalidades distintas, el azul y el rojo, es un color que sugiere, misterio, riqueza, melancolía y sensualidad. Es el color místico por excelencia y símbolo de la vida espiritual, posee la facultad de cambiar las energías negativas en positivas.
Antes se consideraba que el violeta era un color difícil de combinar, además de poco recomendable. Esas teorías se han venido cayendo a diferentes aportes. La cromoterapia, también conocida como la terapia del color, es una técnica perteneciente a la medicina alternativa que tiene como propósito la curación de enfermedades a través del uso de los colores. Sin dudas el color influye en nuestro estado de ánimo y nuestras emociones.
Cada año Pantone, lanza el color de la temporada, el el 2018, el violeta fue el color escogido con el lema “dramático, provocativo y profundo tono morado que habla de la originalidad, la singularidad y aspiraciones para el futuro”. El violeta es un color enigmático que simboliza la contracultura, la ruptura de los convencionalismos y el brillo artístico.
Hoy el violeta es un color que aporta elegancia, distinción y sofisticación a cualquier ambiente, logrando espacios de gran profundidad, sobrios, elegantes y serenos. Son aptos para dormitorios principales, en la oficina o inclusive en la cocina.
Si lo que necesitas es un ambiente más calmado y neutro, prueba a utilizarlo en una sola pared, combinándolo con tonos grises claros, blancos o beige, de esta manera enalteces el color y le das elegancia.
Si eres de los que no te gusta los interiores muy coloridos, perfectamente puedes utilizarlo como un color de acento, es decir, utilizarlo en pequeños objetos dentro de la decoración de tu espacio, un florero, cojín, velas, etc.
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